Logo Vida Alterna


Compártenos
FaceBook Twitter Google Correo Pin it
/www.pensamientos.com.mx/ > Dios > Contestadoras telefónicas >


Contestadoras telefónicas

Contestadoras telefónicas

¿Qué sucedería si Cristo instalara un contestador telefónico automático en el cielo?

Imagínate rezando y escuchando el siguiente mensaje:

Gracias por llamar a la Casa de mi Padre.

Por favor selecciona una de estas opciones:

- Presiona 1 para peticiones.
- Presiona 2 para acciones de gracias.
- Presiona 3 para quejas.
- Presiona 4 para cualquier otro asunto.

Imagínate que Dios usara esta conocida excusa:

De momento todos nuestros ángeles están ocupados, atendiendo a otros clientes. Por favor manténgase rezando en la línea, su llamada será atendida en el orden que fue recibida.

¿Te imaginas obteniendo este tipo de respuestas cuando llames a Dios en tu oración?:

- Si deseas hablar con Gabriel, presiona 5.

- Con Miguel, presiona 6.

- Con cualquier otro ángel, presiona 7.

- Si deseas que el Rey David te cante un Salmo, presiona 8.

- Si deseas obtener respuestas a preguntas necias sobre los dinosaurios, la edad de la Tierra, donde está el Arca de Noé, por favor espérate a llegar al Cielo.

¿Te imaginas lo siguiente en tu oración?:

Nuestra computadora señala que ya llamaste hoy. Por favor despeja la línea para otros que también quieren rezar... O bien:

Nuestras oficinas están cerradas por Semana Santa. Por favor, vuelve a llamar el lunes.

Gracias a Dios que esto no sucede...

Gracias a Dios que le puedes llamar en oración cuantas veces necesites...

Gracias a Dios que a la primera llamada, Él siempre te contesta...

Gracias a Dios porque la línea de Jesús nunca está ocupada...

Gracias a Dios que Él nos responde y nos conoce por nuestro nombre...

Gracias a Dios que Él conoce nuestras necesidades antes de que se las manifestemos...

Gracias a Dios porque de nosotros depende llamarle en oración...

Gracias a Dios por leer este mensaje...

Tu amigo.

PD: ¿Tendrás tiempo como para enviar este mensaje a otra persona?

Colaboración de Gabriel Núñez de León, Gto. México.


Zona de comentarios