Nuestra vida es el reflejo de nuestro interior, nuestra personalidad. Refleja las virtudes y defectos que heredamos de nuestros padres y todas las actitudes que adoptamos con el paso del tiempo. Pero somos capaces de cambiar actitudes negativas y superar miedos y angustias... y tirar lo que no ayuda a disfrutar de la vida. ¡Nuestra vida! Y aunque a veces todo nos indique que debemos llorar. Hagamos posible un reflejo positivo… ¡con una sonrisa!, y las cosas cambiaran. Que nuestra vida refleje luz, paz, energía, alegría y ¡superación! Lo mejor... ¡para todos! Colaboración de Gabriel Núñez de León, Gto., México. |